Este martes ha comenzado en la Corte Federal del Distrito Sur de Manhattan el juicio contra Ross Ulbricht, creador de la web Silk Road (“ruta de la seda”) donde se podían vender y comprar drogas y otros productos ilegales de manera anónima utilizando bitcoins.
Qué es y cómo funcionaba la Silk Road
La Silk Road era un mercado negro on-line de todo tipo de productos ilegales, como drogas, tarjetas de crédito robadas, moneda falsificada, pornografía o armas. Junto con PANDORA Open Market, se considera uno de los mercados negros más populares en la red TOR (lo que se conoce también como “internet profundo” o “darknet”, empleada para navegar de forma anónima). La página se lanzó en febrero de 2011 y fue cerrada por primera vez por FBI el 2 de octubre de 2013. Sin embargo, tan solo un mes después del cierre, las revistas Forbes y Vice comunicaron que la web volvía a estar activa. El FBI la cerró definitivamente el 6 de noviembre de 2014, como parte de la “Operación Onymous”.
Los compradores podían registrarse gratuitamente en la web (no así los vendedores), siendo las comisiones de las ventas destinadas en su totalidad al administrador de la página. Las transacciones se realizaban siempre mediante la moneda virtual denominada Bitcoin, muy alabada por los que quieren comerciar en la red sin ser vistos. La mayor parte de usuarios registrados eran de EEUU, Reino Unido, Australia, Alemania, Canadá, Suecia, Francia y Rusia.
Detención y proceso judicial contra Ulbricht
El 2 de octubre de 2013 Ross William Ulbricht fue detenido por el FBI en una biblioteca de San Francisco por narcotráfico, conspiración para el asesinato y blanqueo de capitales. Se le acusa de ser “Dread Pirate Roberts”, pseudónimo que utilizaba el operador de la web.
Si bien en su primera declaración judicial Ulbricht negó todos los cargos, en el primer día de juicio su abogado Joshua Dratel ha afirmado que Ulbricht reconoce ser el fundador de Silk Road, pero que sin embargo no es la persona que estaba a cargo del sitio; en definitiva, que su defendido no es “Dread Pirate Roberts”. Ha alegado que tras crear Silk Road, Ulbricht la cedió a otros porque le causaba demasiado estrés, y que Dread Pirate Roberts ha elaborado un plan para incriminarle. Por otro lado, el letrado Dratel plantea como defensa la nulidad del registro del portátil que llevaba Ulbricht consigo cuando fue detenido, el cual dice que se practicó sin la orden judicial oportuna y con otras irregularidades.
Además de este juicio en la Corte Federal del Distrito Sur de Manhattan, Ulbricht tiene otro procedimiento en Maryland, donde se le acusa de haber ordenado seis asesinatos a sueldo mientras estaba a cargo de la Silk Road, ya fuera para protegerse de personas que le chantajeaban o que simplemente representaban una amenaza para la web. Así ha quedado constancia de mensajes publicados por DPR como por ejemplo: “Si no te es mucho problema, quiero poner una recompensa por su cabeza. Una persona en mi posición tiene estas necesidades de cuando en cuando”. “Hace poco me hicieron un asesinato limpio por 80mil dólares. ¿Los precios que me has dado son lo mejor que puedes ofrecerme?”.
Según las autoridades, Silk Road generó en ventas un total de 1.200 millones de dólares, habiendo recibido Ulbricht 80 millones de dólares en comisiones. Los fiscales han pedido la cadena perpetua.
El debate del caso Silk Road
Fuera de los juzgados, ha surgido un gran número de defensores de Ulbricht, entusiastas de Bitcoin, que consideran que “el caso es un ataque a la libertad de internet”. Por ejemplo, Roger View, un adinerado empresario que se proclama partidario de la libertad individual frente a los controles gubernamentales, ha donado 165.000 dólares para la defensa judicial de Ulbricht.
¿Hasta dónde puede llegar un Gobierno en su labor vigilante de la red? ¿Hasta qué punto una página web es responsable de lo que en ella hacen sus usuarios? El debate está abierto.
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